Año 2021, del "cocodrilo"

Contemplar el vaso medio lleno. La vida se renueva cada día, cada amanecer. El vaso medio vacío debe quedar en el olvido, los sinsabores, los contratiempos. 

 Por cada puerta que se cierra, se abrirá otra. Ten paciencia, aprovecha la oportunidad cuando se presente, tal vez vista un ropaje que no habías imaginado. 

 La esperanza debe estar viva, atenta. La vida es como una carrera llena de obstáculos. a veces hay que brincarlos, en ocasiones rodearlos, a veces tomar respiro, pero nunca perder el ánimo. 

Comparto que desde hace muchos años me convertí en un asiduo lector de una tira de cómics que el periódico publicaba diario: "Carlitos". Me identificaba con varios de sus personajes: 

Con Carlitos, porque era un niño inteligente, reflexivo, muy tímido que no encontraba manera de demostrar su admiración por la bella vecinita. Cada verano esperaba poder ganar su primer partido de béisbol sin lograrlo. 

 Con Snoopy, su perrito, más inteligente que su amo, que soñaba poder derrotar al "Barón rojo", piloto alemán y as de la Primera Guerra Mundial , quien siempre le ganaba y dejaba su perrera llena de perforaciones a tiros de ametralladora. 

 Con Linus, niño que era feliz acariciando y arrastrando su frazadita, lo que le permitía superar su terrible problema de inseguridad, como yo, que llevo años cargando mi cobijita llena de agujeros y cicatrices. 

Carlitos, Snoopy, Linus y yo les enviamos nuestros mejores deseos para este próximo año, en especial para mis cuatro lectores a quienes agradezco de corazón el tiempo que se han dedicado a mis mensajes. Dios los colme de bendiciones.

Diciembre, 2020. Año de la pandemia. 

 *En mi calendario, el 2021 estará presidido por el símbolo totémico del Cocodrilo, Pues a mí los problemas de la vida me "pelan los dientes"... como los cocodrilos.

Comentarios

  1. Muy cierto Dr. Orellana, muy cierto, la pacienia es indispensable en una infinidad de situaciones y, hoy más que nunca la requerimos, esta pandemia nos ha llevado a ser pacientes para volver a nuestras rutinas, a ser pacientes para encontrar nuevas formas de realizar nuestras actividades, pero indudablemente, cada día tenemos la oportunidad de renovar. Feliz año, Dr. Orellana, recibo con muchoagraecimiento las bendiciones que Carlitos, Snoopy, Linus y usted nos regalan. Hasta pronto

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